Mi opinión sobre Sombras de identidad, de Brandon Sanderson

Título original: Shadows of Self
Traductor: Manuel de los Reyes
Páginas: 440
Año de publicación: 2016
Editorial: Nova
Género: Fantástico

Sinopsis

La sociedad de Nacidos de la Bruma ha evolucionado en una fusión de magia y tecnología en la que la economía se expande, la democracia se enfrenta a la corrupción y la religión se convierte en una potencia cultural cada vez más influyente, con cuatro fes distintas enfrentadas por la captación de conversos.

Esta sociedad tan animada y optimista, aunque todavía tambaleante, se enfrenta ahora a su primera amenaza de terrorismo, crímenes cuyo objetivo es fomentar el descontento de la clase trabajadora y avivar las llamas de los conflictos religiosos. Wax y Wayne, con la asistencia de la adorable y brillante Marasi, deberán dar al traste con la conspiración antes de que las revueltas civiles frenen por completo el progreso de Scadrial.

Opinión

Me voy a saltar mi "fangirleo" de sobra conocido con Brandon Sanderson y la primera trilogía de Nacidos de la bruma y nos vamos directamente al mundo que ya conocimos en Aleación de ley, tres siglos más tarde de los hechos acaecidos en El héroe de las eras.

Reconozco que no disfruté demasiado Aleación de ley y ese nuevo mundo ligeramente steampunk a caballo entre lo victoriano y el oeste americano, quizás porque me la leí del tirón junto a la primera trilogía y me costó aceptar el cambio, pero con este libro Sanderson ha vuelto a tocarme la fibra.

En esta novela no vamos a encontrar una historia épica como la de Vin y Kelsier si no lo que parece un thriller policíaco con toques mágicos. Los protagonistas Waxillium (Wax), Wayne y Marasi se verán involucrados en una trama política que está empujando al pueblo a una segunda revolución. Lógicamente la historia no queda ahí si no que se complicará de manera sorprendente, estableciendo muchas conexiones con la primera trilogía y desembocando en un final sorprendente y muy emocionante.

Me ha encantado la ambientación de Elendel, los diferentes barrios, la evolución de la sociedad, las brumas y sobre todo la forma tan visual que tiene Sanderson de describirnos los poderes alománticos de los personajes, en especial la habilidad de Wax como lanzamonedas, algo que siempre me ha parecido muy espectacular.

El trío protagonista, que tan poco me transmitió en su anterior aventura, me ha conquistado de pleno en esta novela. Quizás he echado en falta un poquito más de participación femenina pero Marasi es precisamente el personaje que más ha evolucionado y me ha encantado como lo ha hecho. Wayne es el punto humorístico del trío sin llegar a ser ridículo en ningún momento y Wax, que era el que menos me gustaba de los tres, se ha convertido en uno de mis personajes favoritos.

También hay pistas sobre el Cosmere (el universo donde transcurren varias de sus series) claro, pero como es habitual hay muchas más preguntas que respuestas. 

¿Y ahora qué? Pues a esperar la traducción de The Bands of Mourning al castellano, que supuestamente llegará en 2017 o aprender inglés a marchas forzadas (que ya va siendo hora) para poder leerlo en el idioma original. Voy a intentar quemar cadmio, a ver qué pasa...

Nota 4,5/5